Countdown: 06 - Un día de verano

Ya me temía no poder cumplir con eso de la entrada diaria, no he tenido tiempo antes, así que ahora pondré las dos entradas.

Bueno, pues sigo donde lo dejé: después de pasar la noche en el onnela me acosté pero no dormí mucho, despedimos a este chico y nos quedamos preguntándonos qué hacer. Brillaba el sol y hacía muy buen tiempo, así que se nos ocurrió desayunar en el cesped, a lo estudiantes en el campus. Desayunamos chorizo y lomo con patatas fritas, jaja. Además alguien había dejado por ahí un sofa viejo, nos lo llevamos y así estuvimos más cómodos.

Hacía muy bueno, por eso parecía un día de verano. Así que fuimos a por bañadores y sin pensarlo dos veces fuimos a darnos un baño en la playa de la barbacoa del día anterior. El agua estaba heladísima, pues hace dos meses estaba completamente congelado, se ha ido descongelando poco a poco y desde luego no ha calentado tanto como para poder bañarse uno.
Pero qué más da, jaja. Además el agua del río de mi pueblo ya me tiene bastante acostumbrado a esto. Lo pasamos bien allí.

Ya he encontrado, por cierto, donde quedarme en junio. Ya sabía que no tendría problemas. Por la tarde estuve despidiéndome de gente. Es tremendo, nunca se sabe quién se puede estar marchando, de repente te encuentras a uno y te dice "me voy mañana", y hala, a despedirte. Este día en concreto estuve yendo de un sitio para otro para no dejarme a nadie.
Al final me acosté muy tarde porque fui a acompañar a un amigo que cogía el tren a las 5 de la mañana. Por eso no me puse a escribir en el blog a la vuelta.